Cinco psicólogos fueron citados a la sede del Cemafe a través del Colegio de Psicólogos de la circunscripción santafesina para vacunarse contra el COVID-19. Pero cuando se retiraron y el personal de salud realizó el balance de la jornada se dio cuenta de que habían cometido un error: los cinco profesionales habían recibido la segunda dosis de la vacuna rusa en lugar de la primera que les correspondía.

Este error en la vacunación derivó en la creación de un “grupo de estudio” para monitorear los efectos posibles y el grado de inmunidad, dado que las dos dosis del suero ruso presentan fórmulas diferentes. Los médicos afirman que no existe riesgo para la salud, al menos hasta ahora no hay evidencia. La comunidad científica aguarda los resultados.